Cristian González en acción
San Lorenzo de Almagro, que ganaba por la mínima, cayó ante Argentinos Juniors (1-2) en el estadio Pedro Bidegain de manera inesperada y cuando el trámite no lo hacía preveer por como se dieron los noventa minutos de acción.
A los 4 minutos de juego, el Ciclón desarrolló su primer avance profundo sobre la valla de Nicolás Peric. En la jugada, intervinieron Nelson Benítez, Alejandro Gómez y Cristian González, quien finalmente realizó un centro que ni Emiliano Alfaro ni Fabián Bordagaray llegaron a tiempo para conectar y resolver.
La posesión del balón le perteneció a Argentinos, que consiguió una administración criteriosa y prolija. El Ciclón, a ello, le contrapuso orden y actitud. Así, el trámite se manejó bajo un cariz parejo. Una falta ejecutada desde la izquierda y que pasó frente al área peligrosamente, marchándose al corner, resultó lo primero interesante del cuadro visitante.
Sobre los 23 minutos y después de un tiempo excesivo sin emociones, Nelson Benítez y Alejandro Gómez organizaron un ataque que finalizó con un intento de larga distancia del último mencionado, el cual terminó cerca del poste izquierdo de Nicolás Peric. Cinco minutos más tarde, un centro de Diego Rivero desde la derecha, fue despejado imperfectamente por un defensor y el arquero, lo que aprovechó Cristian Leiva para ejecutar una 'vaselina' similar a la de su gol frente a Huracán, que Ignacio Canuto sacó sobre la línea.
Sin lucir ni disfrutar un dominio absoluto, San Lorenzo apareció como un equipo más agresivo y entusiasmado en los metros finales del terreno, aprovechando el nerviosismo y desesperación del adversario, ya sin la tranquilidad de manejo de los minutos iniciales y que no encontraba el resultado que lo acercara a su objetivo en la clasificación.
A los 40 minutos, una corajeada excepcional, fantástica y repleta de personalidad de José Luis Palomino (el mejor hombre del Ciclón), que trasladó varios metros el balón, lo asistió a Fabián Bordagaray, que quedó mano a mano y resolvió abajo, el arquero Nicolás Peric dio rebote y Emiliano Alfaro, a meta vacía, definió acertadamente y cristalizó el gol azulgrana.
La zaga entre José Luis Palomino y Fernando Meza, de muchísimo futuro, y más allá de ya resaltar al primero mencioando, resultó de lo más firme y seguro en la estructura colectiva que diseño Sebastián Méndez, la cual merece largamente un fuerte respaldo y confianza, puesto que también sostuvieron con firmeza la ventaja que San Lorenzo tuvo hasta el desenlace del primer tiempo.
El segundo tiempo comenzó más deslucido pero siempre con San Lorenzo de Almagro mejor predispuesto hasta que un desborde por la banda izquierda de Federico Dominguez y su centro, lo transformó en gol el atacante Ismael Sosa, cuando el cronómetro marcó los 16 minutos. Un verdadero baldazo de agua fría para lo que era el trámite. Allí, la situación varió paulatinamente y ya no fue tan favorable.
Con el ingreso de Federico Dominguez y Santiago Raymonda, el técnico Claudio Borghi buscó un revulsivo mientras que Sebastián Méndez trató de darle un refresco al equipo con la presencia de Juan Carlos Menseguez y Sebastián González. A los 27 minutos, primer intento medianamente interesante del cuadro de Boedo: un centro de Cristian Leiva desde la izquierda, no llegó a cabecearlo Fabián Bordagaray en buena posición dentro del área y perdió una interesante acción.
Sobre los 33 minutos, un nuevo centro desde la derecha (Argentinos eligió la espalda de Nelson Benítez para preocupar), lo cabeceó José Luis Calderón y Pablo Migliore, de buenos reflejos, envió el esférico al corner. El juego del equipo azulgrana, ya no tan bueno, fue dominado por la imprecisión y le costó generar. No obstante, siguió intentando pero sobre la hora, un fallo defensivo, le proporcionó la chance a Ismael Sosa para dejar en el camino a Pablo Migliore y definir, dejando al Ciclón sin nada.
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